Todo militar tiene una principal misión: proteger. Por eso, durante la formación en el ejército, se hace especial hincapié en aquellos protocolos que sirvan en auxiliar a la sociedad civil ante un ataque o un accidente. En este sentido, hay un protocolo, dentro de los primeros auxilios, que es fundamental. Hablamos de la conducta PAS.

Cuando hablamos de primeros auxilios, nos referimos a aquellas actuaciones de asistencia a víctimas de una enfermedad repentina o de un accidente. Pues bien, la conducta PAS cumple con esta labor, manteniendo la cadena de supervivencia. Lo que se busca es evitar que el daño inicial provocado se agrave, protegerlo de posibles infecciones y salvaguardarlo hasta la llegada de de los profesionales médicos.

Si bien es cierto que cualquier ciudadano debería de conocer esta conducta de socorro, así como la obligación de prestar socorro, no cabe la menor duda de que un militar tiene que disponer de unos amplios conocimientos para prestar auxilio en una zona de conflicto, además de en situaciones puntuales en nuestro propio territorio.

La Conducta PAS: ¿qué significa?

La conducta PAS responde a las siglas de proteger, avisar y socorrer. Es decir, los tres pasos a seguir dentro de este protocolo, el cual definiremos a continuación.

Proteger

El primer paso de la conducta PAS reside en proteger al accidentado y de la propia persona que le está socorriendo. En un entorno no bélico, donde no haya peligro intencionado, el principal cometido es el de señalar la zona y hacerla visible para evitar daños mayores.

Es lo que sucede, por ejemplo, en un accidente de tráfico. Se señaliza la zona para que otros conductores, con tiempo suficiente, puedan maniobrar y así evitar un choque adicional.

Cuando hablamos de una situación de combate, la primera fase consiste en poner a resguardo a la víctima del posible ataque de un enemigo, siguiendo la fase de atención médica en combate conocida como Care Under Fire (CUF). En un atentado, la prioridad es primero estar protegido para no convertirse en una nueva víctima.

Avisar

El siguiente paso en la conducta PAS consiste en dar aviso a las autoridades médicas. El protocolo, al contactar, está más que claro. Es necesario identificarse de manera certera, indicar la ubicación donde se encuentra junto a la víctima o, si no fuera posible, ofrecer la información aproximada de dónde está.

Se recomienda, durante el contacto con la asistencia sanitaria, que se mantenga una comunicación tranquila y fluida, no colgando antes de que quede claro donde se encuentra y la situación del accidentado.

Socorrer

Como último punto se destaca el hecho de socorrer a la víctima. Aquí, dependerá obviamente de los conocimientos que uno tenga y de los recursos con los que cuenta. Una de las normas básicas ante un accidente es no mover a la víctima en la medida de lo posible, con el fin de evitar nuevas lesiones.

Por otro lado, habrá que efectuar las maniobras básicas de primeros auxilios, ofreciendo el denominado como soporte vital básico. Dependerá de la situación de la víctima, pero se podría resumir en los siguientes.

Por un lado, si una persona está inconsciente y no respira, se procederá a la maniobra de reanimación cardiopulmonar. Si estamos ante un atragantamiento, se realizará el tratamiento de obstrucción de la vía aérea o, en su defecto, a la compresión abdominal.

Como puedes ver, la conducta PAS es muy sencilla, ¡pero también muy efectiva!